Acaban de publicar la inflación de agosto en Chile y ésta asciende a 1.1% lo que suma en el acumulado para el 2007 un inusual 5%. A estas alturas todos conocemos las razones de esta alza en el índice de precios y casi toda se debe al aumento del rubro alimentos por los conocidos problemas que trajo el crudo invierno de este año, y también claro al altísimo precio del petróleo, lo mismo que ha sido enfatizado por el Banco Central y por otros analistas como queriendo tranquilizar a los agentes privados de la naturaleza externa de este indicador. Esto trae como consecuencia una obvia pregunta y una aún más obvia respuesta: ¿Qué decidirá hacer el Banco Central con la tasa de interés?, la va a subir pues. Está cantadito, todo el tiempo me has dicho que te preocupas de la inflación y últimamente me dijiste que "harás todo lo posible para que la inflación esté la mayor parte del tiempo en 3%", así que la tendrá que subir para afirmar su credibilidad y reducir las expectativas de inflación futura, determinante principal de la inflación. De aquí surge una pregunta que no es tan obvia de responder: ¿El actual estado de la economía necesita un alza de tasas, más aún conociendo el pobre aumento de la actividad de 4% en agosto?. Conocida la fuente externa de la inflación ¿es necesario contraer la demanda interna y apreciar más el tipo de cambio?, ¿Qué pasaría si estuviésemos con una tasa de 6% o más y enfrentamos shocks externos como los actuales, se aumentaría la tasa? o mejor dicho, ¿se debería aumentar la tasa?. Nadie dijo que esto era fácil, menudo problema para el Banco Central.
Las respuestas tendrían que ver con conocer los niveles hasta donde se puede aumentar la tasa de interés o conocer cuál es el nivel natural de la tasa de interés, cosa que nadie conoce ni conocerá.
UPDATE: Exportadores muestran sus reparos frente a la eventual alza en la tasa de política monetaria.
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario